Fue un maestro para todos ellos, y así quedó demostrado el domingo en la casa de cultura de Aoiz. Alrededor de un centenar de músicos se dieron cita sobre un mismo escenario para honrar con sus instrumentos la memoria de Emilio Estévez Álvarez. El profesor de saxofón y exdirector de la banda de música y de la escuela de música local falleció a los 61 años en agosto tras luchar contra una larga enfermedad.

En un acto organizado por la asociación cultural Bilaketa, a la que tan ligado estuvo, el concierto lo inició la Txaranga Bilaketa para entrar en escena después la banda de música Mariano García que el propio Emilio Estévez puso en marcha allá por 1997. Dirigida ahora por su exalumno de saxofón agoizko David Martínez, se sumaron al conjunto para la ocasión un buen grupo de antiguos miembros que años atrás fueron pupilos de Estévez.

Tanto Juan Beroiz, coordinador de la txaranga, como el propio David Martínez, director de la banda, y el presidente de Bilaketa, Salvador Gutiérrez, tuvieron unas palabras en recuerdo de Emilio Estévez. De él destacaron su buen hacer musical y su valía como profesor y como persona. También valoraron el gran vínculo establecido entre Aoiz y su familia. Sobre el escenario, y arropadas por todos los músicos, recibieron un fuerte aplauso su viuda, Raquel Gutiérrez, y sus hijas Beatriz y Cristina.

El concierto se cerró con dos temas típicos gallegos, un guiño a los orígenes familiares de Estévez. Se titulaban Manoliño y Ecos de Galicia, y junto con la banda actuaron los gaiteros de Os Fillos de Breogán del Lar Gallego de Pamplona.

Texto: Aser Vidondo
Komunikabidea: Diario de Navarra

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