A oscuras. Así se quedaron el pasado miércoles, en torno a las 11 de la mañana, varios edificios municipales de Aoiz. Iberdrola cortó el suministro eléctrico debido al volumen de facturas impagadas, y este viernes, sobre las 5 de la tarde, regresó la electricidad una vez el consistorio pudo abonar 69.500 euros tras pedir un préstamo bancario. Fuentes municipales lamentaron que no se les hubiera comunicado días atrás el inminente corte, que afectó a la casa de cultura y biblioteca, a la escuela de música y sede de Bilaketa, y al almacén municipal del polígono.
Según explicaba ayer el alcalde de Aoiz, Unai Lako (Bildu), “el Ayuntamiento siempre iba abonando las facturas eléctricas con 3 ó 4 meses de retraso, e Iberdrola siempre aguantaba hasta que daba un aviso directo telefónico, y entonces se pagaba”. “Son momentos complicados, hay pocos ingresos municipales y en momentos muy puntuales del año, por lo que vamos haciendo malabares conforme van llegando. Tratamos de priorizar en los pagos a empresas pequeñas que pueden aguantar menos las deudas que las grandes”, expuso. Recordó asimismo que el propio Gobierno foral les adeuda 650.000 euros.
Esta vez, según dijo, “Iberdrola no avisó y cortó la luz”. “La última notificación que teníamos era una carta de abril sobre los retrasos en los pagos, pero después se fueron abonando ya algunas facturas”.
Para corregir la ausencia de suministro, y ante la falta de liquidez, el consistorio ha tenido que pedir un préstamo bancario por 69.500 euros, equivalente al total de facturas que se debían desde enero a abril (había parte pagadas). Tras abonarse el montante a Iberdrola, ayer volvió la luz. No afectó el corte al propio ayuntamiento, al alumbrado público o el colegio, “al ser servicios básicos”. Tampoco a la zona deportiva, al llevar allí la gestión una empresa pública y, según el alcalde, estar los pagos al día.
Recordó el alcalde que, hasta ahora, Iberdrola era la distribuidora y comercializadora eléctrica de los edificios municipales, pero que tras una auditoría energética, y en pos de un ahorro, se ha abierto un proceso de cambio de empresa comercializadora. “No sé si tendrá esto algo que ver con este corte que ha llegado sin avisar”, dijo. “Es la primera vez que nos pasa, si bien un día nos cortaron la luz en la escuela de música al deber una cantidad insignificante”, añadió.
Afecciones
Entre las afecciones por el corte de luz en estos edificios, por ejemplo, ayer por la tarde se tuvo que suspender la audición de fin de curso de la escuela de música en la casa de cultura, ante las dudas de si volvería el suministro. Para hoy no peligra, en cambio, la exhibición de la escuela de danza.
La escuela de música, en su última semana de clases, funcionó “a medias”, y la prematriculación para el próximo curso se hizo “con papel y boli”. La biblioteca, ya en horario de verano matutino, estuvo abierta pero no se podían prestar libros al no funcionar los ordenadores.
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