V San Silvestre en Aoiz

Ya es el quinto año que se celebra en Aoiz la carrera del 31 de diciembre. La que la gente que hace deporte quiere acabar el ciclo administrativo corriendo y con el fin de no tener que desplazarse a ningún otro pueblo, hace 5 años se comenzó a hacer en Aoiz una carrera con salida a las 6 de la tarde del frontón Toki-Eder, a la que sobre todo acude gente menuda. La carrera está dividida en dos: una primera de 1 kilómetro y otra, seguida, de 3 más. Es un modo de despedir el año de forma sana, divertida y deportiva. Es una manera de hacer repaso a los minutos dedicados al deporte ese año y una declaración de intenciones.

Desde que en 1582 se instauró el calendario Gregoriano se viene celebrando de uno u otro modo la Nochevieja, el día que se acaba el año administrativo y comienza el siguiente. Fue Julio Cesar quien decidió que fuese el día 1 de enero el que comenzaba el año y lo hizo porque era el día en el que los funcionarios al servicio del emperador juraban su cargo. Lo mismo podía haber elegido el doce de febrero.

El calendario está plagado de curiosidades e imperfecciones. Ese mismo calendario gregoriano se desvía del año tropical, o sea al que realmente rige el giro de la tierra, alrededor del sol en 1 día cada 3300 años.  Para conseguir esta exactitud casi total el 4 de Octubre de 1582, pasó a ser el 15 de octubre y se cargaron 10 días. ¿Te imaginas que hoy fuese 10 de enero?

Pero anteriormente la cosa era peor, no se aclaraban con los días del año, ni con los meses. Hubo años de 304, 355, 360 y 365 días, meses de 23 a 31 días y hasta había un mes que ha desaparecido llamado Mercedonius.

El año está plagado de santos, de ritos y fiestas. En realidad hay más santos que días y una sola fecha se la disputan entre varios.

Bueno, visto que nuestros acontecimientos están guiados por el capricho del pasado no creo que haya que prestarle más atención al tema. Hoy es un día tan bueno como otro cualquiera para dejar de fumar, beber, decir tacos y empezar a aprender euskera, inglés y alemán. Y si no, tranquilo que mañana amanecerá otra vez.  No dejemos que el almanaque guíe y cuente nuestra vida, mejor será contar por experiencias, amistades, amores, comidas y cenas, primaveras y nieves que por la dictadura de los números y los colores del calendario.

Hoy como ayer, habrá que salir a correr un poco para disfrutar del sol y del frío de la mañana.

Feliz día y feliz carrera a todos.